Rebekka Bakken en Madrid. Ayer

Como cada año desde hace 5 me voy a ver un par de conciertos del Festival de Jazz de Madrid acompañando a dos cracks. Este año el cartel se ha decantado un año más (cada vez peor) por los nuevos valores siempre en alza, los de siempre, Wayne Shorter incluido y la fusión foránea que sale más económica.

Y, puesto que nos dormimos comprando las entradas y no pudimos ver a Dianne Reeves, pues que nos acercamos a ver a la noruega Rebekka.

Allí estábamos como un folio en blanco pendiente de ser escrito cuándo salió una dama de pies grandes, rasgos élficos y voz dulce y potente para embelesarnos con su canto.

Aunque cuando terminó el concierto me quedé decepcionado porque a pesar de escuchar dos perlas de incalculable valor de corte folk, su afán de protagonismo o su incapacidad para encajar con el grupo o sus temas de aire simplón no consiguieron sobrecogerme, más bien aburrirme y hacerme creer que estaba en una pre-select de OT británico…